Congreso Permanente de Medicinas
Naturales y Terapias Complementarias al pueblo de Venezuela
Ante la coyuntura mundial y nacional referida a:
·
la “Alocución
de apertura del Director General de la OMS en la rueda de prensa sobre la
COVID-19 celebrada el 11 de marzo de 2020”, donde asegura que “hemos
llegado a la conclusión de que la COVID-19 puede considerarse una pandemia”,
·
así como de la detección de dos casos en el
territorio venezolano de dos personas infectadas con el virus que provenían de
España, lo que generó el decreto de emergencia sanitaria por parte del gobierno
venezolano,
·
y ante las reacciones de pánico que hemos
detectado en la sociedad venezolana
Consideraciones generales
El Congreso
Permanente de Medicinas Naturales y Terapias Complementarias emite el
siguiente documento, sobre todo para:
·
hacer un
llamado a la calma a la población general ya que estamos a tiempo y tenemos
condiciones diversas a nuestro favor como país para afrontar la coyuntura
·
brindar
herramientas para el manejo corresponsable de la información y brindar apoyo
psico afectivo y emocional para el manejo de la coyuntura
·
Colocar
en la palestra aquellos hechos que nos permiten entender integralmente y de
forma crítica la situación real, más allá de teorías de conspiración, o
matrices comunicacionales que generan de pánico por propagadas malintencionadas,
y por olas de rumores y desinformación producto de las nuevas dinámicas que
como sociedades nos enfrentamos con la expansión de las tecnologías de la
información y comunicación
·
Brindar
orientaciones generales sobre cómo prevenir y fortalecer el sistema
inmunológico de forma integral desde las medicinas naturales y terapias
complementarias, más allá de las recetas descontextualizadas y reproducidas
de forma acrítica e ingenuas con, por ejemplo, el uso de plantas medicinales
como si se tratarán de fármacos, lo cual es un error epistemológico y
metodológico que no es efectivo en la mayoría de los casos y puede acarrear
importantes riesgos para la salud, en vez de soluciones reales.
Ante lo antes
expuesto estructuramos el presente documento en las siguientes secciones: 1)
manejo corresponsable de la información; 2) el maneo psico emocional es la clave;
3) Hechos del COVID-19 que nos llaman a la calma; 4) Aprovechar la coyuntura
para educar a la población sobre el sistema inmunológica y su relación con el
estilo de vida y alimentación; 5) Conclusiones preliminares; 6) Recomendaciones.
1.-Manejo corresponsable de la información
Lo primero y más urgente en la
coyuntura inmediata es ayudar a las personas que atendemos, orientamos y formamos,
a manejar adecuadamente los mensajes, ya que estamos en contextos repletos de
desinformación, de manejo amarillista por parte de medios de comunicación (lo
que se ha constituido en la praxis dominante), además de las nuevas lógicas de
las redes sociales que se llenan de cadenas, videos, imágenes sin autor, pero
que para la población puede convertirse en las principales fuentes de (des)
información generando pánico y confusión, además de ser el escenario ideal para
aquellos que con malas intenciones apuestan al pánico y a deslegitimar la
institucionalidad nacional e internacional. En tal sentido, recomendamos a la
población general:
1.
No
reproducir las cadenas e informaciones no oficiales ni a convertirse en
creadores de mensajes. Sabemos que en la mayoría de los casos se puede
hacer de forma bien intencionada, pero lo que se colabora es a generar más
confusión. En el caso de las medicinas naturales y terapias complementarias, la
tendencia a enviar recetas que “curan” el virus, muestra una visión poco
profunda de la visión de la salud, ya que las plantas actúan de forma distinta
a los fármacos. Por otra parte, no se tienen suficientes estudios sobre el
COVID-19 para determinar que una planta o una combinación de estas sea la cura
o vacuna. En estos momentos, lo importante es la prevención siguiendo además
del tema de la higiene recomendada por la OMS y el gobierno nacional, aspectos relacionados al estilo de vida y
alimentación vinculados al fortalecimiento del sistema inmunológico, lo que
verdaderamente constituye el aporte de las medicinas naturales y terapias
complementarias en lo preventivo.
2. En
tal sentido, recomendamos informarse
exclusivamente por medios oficiales como la OMS y las del gobierno, ya que
inclusive cadenas internacionales de prestigio, medios de oposición e incluso
medios que apoyan al gobierno venezolano, han tenido un mal manejo
comunicacional, por el uso de titulares amarillistas, incluso algunos con
posibles buenas intenciones, pero que genera más pánico innecesario.
3. Cuando reciba una cadena o un mensaje con
información alarmante y con tono emocional desproporcionado, dude
inmediatamente de su veracidad y verifique la información por vías oficiales
exclusivamente. De revisar otras vías, hacerlo con mirada crítica y no
creer en todo lo que lee si no es información oficial verificable.
4. Por
otra parte, recomendamos informarse sin
obsesionarse. Evite que este tema sea el único que ocupe su día, de esta
manera, evitaremos entrar en pánico y llenarnos de miedo y estrés.
5. Por
último, recomendamos no hacer eco de
teorías de conspiración. No es el momento, Habrá tiempo para hacer análisis
crítico. Pero estas teorías, la mayoría hipótesis no comprobables, poco ayuda a
la población general en estos momentos a manejar el miedo y la avalancha
informativa que genera confusión. Deslegitimar el gobierno nacional, como a las
propias organizaciones internacionales, solo colabora a generar un estado de
caos y de deslegitimación de las instituciones que poco aportan a la salud
pública colectiva, sobre todo la emocional que es lo primero.
2.-El manejo psico emocional es la clave
Ante este escenario y las
reacciones desproporcionadas de la población no solo en nuestro país sino en el
mundo, exacerbada por el manejo irresponsable y amarillista de los medios de
comunicación a escala planetaria, así como al nuevo escenario de las redes
sociales que han generado dinámicas complejas y poco conocidas por las
sociedades contemporáneas, la clave de
manejar la situación actual está en brindar orientación para el manejo psico
emocional de la población. En tal sentido, es importante manejar el miedo,
ya que este:
·
Deteriora a los seres humanos en sus dimensiones
emocionales, sociales y físicas, deteriorando incluso el sistema inmunológico
·
Hace que los individuos y sociedades tomen
decisiones erradas
·
Afecta la vida cotidiana, la socialización, las
economías, la democracia
·
Hace más traumático seguir medidas como
cuarentenas, aislamiento, cierre de espacios públicos, etc. exponiendo a individuos
y colectividades a ataques de pánico lo cual genera mucho sufrimiento.
·
Configurar eventos traumáticos dificulta generar
colectividades resilientes, es decir, que aprendan y reorganicen en función de
superar las dificultades como la actual.
·
Por lo antes expuesto, sabemos que el miedo no
es la mejor estrategia para educar a una población, pero es la lógica dominante
históricamente.
Entonces, consideramos que toca
orientar a cada caso, cada comunidad, a cada grupo, en técnicas diversas para
el manejo del miedo, el estrés, tales como meditación, lecturas que suban el
ánimo, aprender idiomas, tocar un instrumento musical, ver buenas y enaltecedoras
películas, pintar, orar, hacer ejercicios
psico físicos moderados, practicar la cocina intuitiva saludable, hacer jardinería,
organizar los espacios del hogar, aunado a una adecuada información y manejo
del mismo, impulsando la confianza por
la vida, por la humanidad, por la capacidad que tenemos de resolver
colectivamente los problemas, superando las heredadas visiones apocalípticas y
fatalistas. Es importante considerar que la oración y meditación son
adecuadas cuando se hacen desde la confianza por la vida, las ideologías y
religiones en las que la oración y meditación se basan en la culpa, el miedo y
la victimización no ayudan a manejar las emociones en estos contextos.
Es importante estar bien
informado dedicando un tiempo corto en el día y a través de fuentes confiables
que no usen tonos emocionales alarmantes, pero no de forma obsesiva, ya que
genera un espiral de estrés que puede terminar en miedo y pánico, lo cual es
contraproducente en escenario de cuarentena. Como hemos planteado, recomendamos
informarse a través de medios oficiales nacionales e internacionales, evitar sumergirse
en teorías de conspiración y otras similares que generan perturbación
psicológica, y desconectarse de las redes sociales que están saturadas de
rumores e informaciones de todo tipo que genera mucho confusión.
3.-Hechos del Corona Virus que nos llaman a la calma
Algunos hechos que hay que resaltar, son los siguientes
·
Que la OMS le denomine pandemia no significa un
evento de magnitudes apocalípticas; de hecho, en la misma “Alocución
de apertura del Director General de la OMS en la rueda de prensa sobre la
COVID-19 celebrada el 11 de marzo de 2020”, aseguró que “nunca antes
habíamos visto una pandemia que pudiera ser controlada”.
·
Aunque en la alocución citada también expresó
que “Nunca antes habíamos visto una pandemia generada por un coronavirus”, no significa
que sea la primera vez que se hable de pandemia. De hecho, en el 2009, la OMS
decretó pandemia a la gripe H1N1, y fue superada el estado de emergencia, sin
embargo, se trata de otro tipo de virus que no se había registrado, por ello,
la alarma. Así mismo, el nivel de mortalidad mundial por la H1N1 finalmente fue
significativamente menor al de las principales enfermedades crónicas no
trasmisibles, e incluso, al de las gripes comunes en su conjunto. Aunque es temprano para sacar conclusiones
definitivas, estos hechos son importantes para hacer un llamado a la calma a la
población en general y a las autoridades.
·
Es importante considerar algunos elementos
técnicos del término pandemia: uno d elos elementos concretos es que ha sido
detectada en todos los continentes, con una importante capacidad de contagio y
expansión, pero no se trata de una situación sin control ni con alto porcentaje
de mortalidad; por el contrario, la
propia OMS habla de que hoy más que nunca la humanidad tiene los medios para
controlarla.
·
Para más del 80% de los casos de personas
afectadas por el virus, no ha sido más que una gripe que a los pocos días, se
superan los síntomas sin tratamientos específicos más que reposo e hidratación.
El protocolo exige es aislamiento para cortar la cadena de propagación. Alrededor
del 2% de los contagiados han fallecido, siendo personas con su salud
comprometida por enfermedades crónicas, entre otras.
·
China y Korea del Sur, que son los dos
principales países afectados ya están presentando mejorías en sus estadísticas
oficiales, por lo que se han superado los estados de alarma más severos.
Un hecho poco mencionado: el clima, la latitud y los virus
Las diferencias ambientales son
claves para entender la situación. Sin embargo, la OMS no expone este hecho ya
que, al decretar una emergencia, la lógica de sus protocolos es la de generar
alarma para que los países miembros tomen las mayores previsiones posibles y no
bajen la guardia, sobre todo porque el COVID-19 es poco conocido; aunque la
familia de los coronavirus es de vieja data. En todo caso, exponemos los siguientes hechos sin ánimo de desestimar las previsiones
oficiales que invitamos a seguir, por el contrario, de lo que se trata es
hacer un llamado a la tranquilidad a la población que está aterrada:
·
En los territorios donde hay cuatro estaciones
marcadas, durante los inviernos, las gripes estacionales generan cientos de
miles de muertes anuales en casos de poblaciones vulnerables por enfermedades
crónicas no transmisibles. Las bajas
temperaturas hacen que el sistema inmunológico de los individuos sea más
vulnerables a este tipo de enfermedades.
·
Así mismo, los virus suelen multiplicarse mejor
en climas fríos y secos. Incluso si observamos los mapas de afectación del COVID-19
que se llevan por distintas plataformas en tiempo real, podremos observar que
la mayoría de los casos se ubican en los países del hemisferio norte que están
saliendo de la época más fría del año. Es en estos mismos países donde la
propagación es más violenta.
·
Mientras que en los países tropicales, los casos
han sido básicamente personas que vienen de países del norte, sin registrarse
contagio “comunitario” que es el término usado por organizaciones
internacionales. En la imagen que presentamos a continuación basada en la elaborada
por la Corporación de Radio y Televisión Española,
evidenciamos que en la región tropical, la afectación es muy baja, y
probablemente sea por personas que viajaron de otras latitudes.
Este hecho ha tenido poca
relevancia comunicacional, aunque algunos especialistas han asegurado que por
prevención no se puede pensar que este virus actúe como los otros, que pierde
fuerza en climas cálidos, por ser uno nuevo[1].
Sin embargo, no hay nada que indique que
se propagará con la misma virulencia en los países tropicales y en las épocas
cálidas en los países templados con la velocidad que se ha propagado que en los
climas templados en la época más fría del año. En todo caso, es un hecho a
favor de los pueblos que se ubican en la franja tropical, aunque aún es temprano
para determinarlo con certeza.
4.-Aprovechar la coyuntura para educar a la población sobre el sistema
inmunológica y su relación con el estilo de vida y alimentación
Lo más importante para las
medicinas naturales y terapias complementarias es el fortalecimiento del “terreno”, es decir el
organismo, ya que este es entendido como un sistema en estrecha relación con su
entorno ambiental y social, en donde múltiples dimensiones están vinculadas a
su salud. El terreno es, entonces, los cuerpos, que como sistemas dinámicos y
abiertos, está en constante movimiento e interrelacionados, desde la
homeóstasis, es decir, la tendencia dinámica al equilibrio biológico, en
relación con las múltiples dimensiones y factores que interactúan. En palabras
sencillas, la salud no es sólo física, también es psico emocional, socio
cultural y espiritual. La salud también es política.
Por lo tanto, el esfuerzo de las medicinas naturales y
terapias complementarias es a generar cambios de estilo de vida y alimentación que
fortalezcan el terreno, previniendo también la propensión al contagio, e
inclusive mejorando la reacción orgánica ante casos positivos, lo que redunda
en el fortalecimiento del sistema inmunológico de cada organismo y finalmente
en la salud colectiva. Todo lo antes
planteado significa que, como lo expresa la OMS, lo más importante es la
prevención. Nuestro papel es plantear aquello que poco se trabaja por la visión
propia de los modelos de salud hegemónicos: promover estilos de vida
saludables, más allá de la dependencia a las industrias farmacéuticas.
Aunado a las medidas de higiene
para evitar el contagio con la intensión de romper la cadena de transmisión y
evitar la propagación, a las que nos signamos y apoyamos sin duda alguna en
estos momentos (luego habrá tiempo y claridad para hacer una revisión crítica
de los protocolos, conceptos y campañas comunicacionales de la OMS), desde
COPERMENAT aportamos en los distintos espacios en los que hacemos vida, a la
reeducación de la población para que sea corresponsable de su salud. Por tal
motivo, vemos esta coyuntura como una importante oportunidad para impulsar
estos cambios de estilo de vida y alimentación necesarios para contar con
poblaciones más sanas así como organizadas y resilientes.
¿Cómo fortalecer el sistema inmunológico?
1.
Alimentación
Las dietas modernas han pasado
por modificaciones importantes que según la OPS[2]
están asociadas a las principales causas de mortalidad y morbilidad actuales:
las enfermedades crónicas no transmisibles. Pero para las medicinas naturales y
terapias complementarias, no solo están asociadas a estos problemas, sino que
también están asociados al deterioro del sistema inmunológico. Por otra parte,
recordemos que las personas vulnerables a virus como el COVID-19 son
precisamente personas que padecen de enfermedades crónicas no transmisibles;
por lo tanto, y reafirmamos, las dietas modernas, basadas en productos
dominados por las grandes corporaciones, repletas de aditivos sintéticos, que
han perdido fibras y micronutrientes, deterioran nuestro sistema inmunológico.
Por lo tanto, lo más adecuado es mantener una alimentación lo más natural posible.
A continuación damos algunas
orientaciones que pueden varias en función del territorio, la cultura, así como
la condiciones intraorgánica referente a enfermedades crónicas, tratamientos
farmacológicos, entre otros. Así que es
importante que no lo tomemos como recetas, sino como principios que permiten
entender cómo funciona el organismo para adaptarla en función de cada contexto
y caso.
La alimentación y la eliminación de sustancias tóxicas vía intestinal
Uno de los principales problemas
de los alimentos muy procesados, en particular cereales como el trigo que se
acentúa como problema en los países tropicales, es que han sido refinados,
perdiendo parte importante de sus nutrientes, en particular las fibras. En
buena parte del siglo XX, se consideró a las fibras como algo no importante ya
que se suponía no aportaba nutrientes y eran eliminados vía intestinal. Este
factor fue muy lucrativo para las grandes corporaciones. Sin embargo, desde las medicinas naturales y terapias
complementarias se sabe que la baja ingesta de fibra genera estreñimiento,
ya que es más difícil la eliminación vía intestinal. El estreñimiento genera la
incapacidad de eliminar desechos metabólicos. Recordemos que a través del
intestino eliminamos desechos, pero también sintetizamos y absorbemos
nutrientes, disminuyéndose la capacidad de asimilar micronutrientes. Al no
eliminar desechos metabólicos de manera adecuada y oportuna, el organismo
reabsorbe los desechos, generando importante problemas de salud. Parte de estas
toxinas son enviadas a otros órganos donde se eliminan sustancias, como lo es
la piel, los riñones y los pulmones. Cuando afecta a los pulmones, se presenta
mucha flema y una mayor vulnerabilidad a enfermedades respiratorias. Esto
aplica con importante énfasis con el consumo de lácteos y quesos, que en nuestro
contexto son muy procesados, repletos de distintos tipos de aditivos, y cuyo
consumo en el trópico, por el elemento ambiental, es asimilado de forma
distinta que en los países templados con inviernos intensos, generando mayor
cantidad de desechos intraorgánicos.
La alimentación y la eliminación vía renal
A través de los riñones también
eliminamos desechos a través de la orina. Una baja ingesta de agua y un exceso
consumo de lácteos, proteínas animales y alimentos procesados y
ultraprocesados, genera problemas renales, como la aparición de piedras, así
como la acumulación de toxinas en el organismo, debilitando a su vez el sistema
inmunológico.
La alimentación y el sistema respiratorio
La acumulación de desechos
metabólicos por exceso de consumo de alimentos procesados y ultraprocesados, como
lácteos, harinas refinadas, azúcares, salsas artificiales, bollerías de
panadería, entre otros, genera acumulación de desechos metabólicos que aunados
al estreñimiento, son expulsados por las vías respiratorias formando flema,
inflamación y vulnerabilidad al ingreso de virus y bacterias por estas vías.
La alimentación, la salud, los agroquímicos y los alimentos de temporada
El consumo de alimentos repletos
de agroquímicos está relacionado al deterioro del organismo en general, en
particular al deterioro del sistema inmunológico. Por lo tanto, lo ideal es el
consumo de alimentos producidos localmente de forma agroecológica. Por el
momento, al consumir alimentos de temporada, poco o no procesados industrialmente,
se garantiza el consumo de menos agroquímicos y aditivos sintéticos; aunado a
esta realidad, los alimentos de temporada contienen mayores concentraciones de
micronutrientes.
La alimentación y los micronutrientes
Las culturas alimentarias
modernas hacen mucho énfasis en el consumo de macronoutrientes como lo son las
proteínas, los carbohidratos y las grasas; sin embargo, se considera muy poco
el consumo de micronutrientes. El bajo consumo de micronutrientes como lo son
las vitaminas, minerales y oligoelementos, debilitan el organismo en general,
así como su sistema defensivo. Los alimentos procesados y ultraprocesados han
perdido importantes concentraciones de micronutrientes, y a veces son
enriquecidos de forma sintética, lo cual también tiene efectos colaterales; así
mismo, su aprovechamiento es significativamente menor al consumo de
micronutrientes de alimentos naturales. Por tal motivo, es fundamental el
consumo de alimentos poco procesos o no procesados como lo plantea la OPS. Para el consumo de vitaminas importantes
para el sistema inmunológico como la vitamina C, es importante considerar que
el consumo de frutas frescas recién abiertas es la clave, ya que buena parte de
las vitaminas se degradan rápidamente. Un error común es creer que los
cítricos son los que contienen vitamina C, cuando está en la mayoría de frutas
frescas. Más adelante profundizaremos al respecto.
Alimentos no recomendados: harinas refinadas, azúcar refinado,
saborizantes artificiales, alimentos con preservativos, salsas artificiales,
cubitos, refrescos, bebidas de sobre, embutidos, enlatados, lácteos (sobre todo
los modernos que están muy procesados). En el trópico el exceso de consumo de
quesos está asociado a enfermedades respiratorias. Alimentos fritos,
chucherías, jugos pasteurizados repletos de azúcar, compotas artificiales,
entre otros. Exceso de estimulantes como café.
Alimentos recomendados: Frutas, vegetales y hortalizas, granos, granos
germinados, cereales poco procesados, harinas poco procesadas como el fororo y
el gofio, casabe, avena, entre otros. Alimentos frescos, en particular frutas
recién abiertas para que no pierdan vitaminas importantes para el sistema
inmunológico. Alimentos cocidos, a la plancha u horneados. Semillas oleaginosas
como el ajonjolí el maní o el merey. Semillas de auyama, melón, entre otros.
Alimentos que fortalecen la flora intestinal: Chayota, pira,
moringa, acelgas, calabacín, berenjena, auyama, batata, papa con cáscara, granos
germinados, en general las frutas, vegetales y hortalizas fortalecen la flora
fermentativa que ayuda a mejorar la salud integral del organismo y a fortalecer
el sistema inmunológico.
Alimentos con fibra para ayudar a la eliminación de desechos vía
intestinal: aumentando el consumo de frutas vegetales y hortalizas en
general, se aumenta el consumo de fibra y mejora la eliminación vía intestinal.
Entre los alimentos más importantes para mejorar la eliminación intestinal
encontramos: lechosa, cambures y plátanos maduros, guanábana, tamarindo, sábila
en ponches y jugos (eliminándole el amargo), casabe, entre otros. Frutas que
generan estreñimiento: guayaba (en particular cuando está verde), cambur y
plátanos verdes, entre otros.
Alimentos que ayudan a los riñones: agua potable, infusiones de
plantas como albahaca, albahaca morada, menta, hierba buena, malojillo, agua de
coco, infusión de cáscara de mandarina, cáscara de piña, infusión de anís
estrellado, limón, apio España, entre otros.
Alimentos propicios para mejorar el sistema inmunológico y la salud del
sistema respiratorio: jengibre, cúrcuma, agua de coco, pulpa de coco,
albahaca morada, sábila, lechosa, mango, auyama, calabacín, ajo, cebolla,
limón, naranja, perejil, cilantro, apio España, entre otros. Como medidas
naturales nos ha funcionado muy bien para prevenir y tratar estados gripales el
uso ambiental de cebolla picada en la cocina y el cuarto; consumo del tradicional
jugo 3 en 1 (naranja, zanahoria y remolacha) siempre y cuando no se tengan
problemas gástricos o de otro tipo que pueda ser contraindicado el consumo de
esto jugo; sopas verdes (ajo, cebolla, cebollín y apio España).
2.
Ejercicio físico, higiene postural y manejo de
las emociones
Realizar ejercicios
cardiovasculares moderados diariamente así como tener una buena postura es
importante para que el organismo funcione adecuadamente. Realizar ejercicio
físico y tener una buena postura permite que los nutrientes y desechos circulen
por el sistema, activan el metabolismo y la absorción de nutrientes, ayuda a
regular el sistema endocrino y nervioso, en particular drenando las hormonas y
neurotransmisores que produce nuestro organismo en momentos de estrés como el
cortisol, la adrenalina y la noradrenalina, que al mantenerse en el sistema en
largos períodos de tiempo, y ante la ausencia de ejercicio físico, se
convierten en sustancias tóxicas que deterioran la capacidad de absorber
nutrientes, afectan los esfínteres asociándose a estreñimiento y acumulación de
toxinas, generan irritación nerviosa, inflamación de tejidos y órganos,
disminución de las defensas, entre otros factores.
Lo antes nombrado sirve para
reforzar la importancia del manejo de las emociones a través de técnicas
diversas apropiadas a cada comunidad como ejercicios de respiración para el
control del estrés, yoga, tai chi, ejercicios psico físicos, visualizaciones,
entre otras.
Para el caso de pacientes
ebóticos (que padecen de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) realizar
ejercicios con botella de agua y
pitillos, soplando 10 veces, tres veces al día.
3.
Higiene
La higiene es clave en el
fortalecimiento del sistema inmunológico; no solo para atacar al agente
patógeno externo. Una adecuada higiene corporal y ambiental evita que el
sistema orgánico esté permanentemente en estado de estrés al atacar y
contrarrestar los constantes agentes provenientes de ambientes poco higiénicos.
El tema de la higiene está
relacionado a la limpieza del hogar, del lugar de trabajo, espacios ordenados,
sin objetos acumulados y arrumados que hacen más difícil la limpieza diaria y
se constituyen en espacios idóneos para el sucio y la enfermedad. Así mismo, la
luz solar es un importante bactericida, así como la libre circulación del aire
se posiciona como un elemento central de higiene. Los espacios higiénicos y
ordenados ayudan a su vez a mantener estados de calma y relajación mental.
4.
Descanso y relajación
No dormir, no relajarse, no
descansar, no entretenerse, mantener el organismo en permanente estado de
estrés y miedo, está contraindicado en estos escenarios ya que deterioran el
sistema inmunológico. Por el contrario, hay que descansar adecuadamente, para
ello, lo enlazamos en el manejo de la información con las múltiples técnicas de
relajación. Es necesario además a prender a manejar la información y a llenar
la vida y la mente de cosas que nos guste, de elementos agradables, estéticos,
naturales, de vida en general. Cultivar la confianza en la vida, el buen humor,
más allá de las circunstancias, genera que el organismo fortalezca su farmacia
interna, sus defensas, para equilibrar los sistemas endocrinos, nerviosos,
circulatorios, entre otros.
5.
Conclusiones preliminares
Mientras que la medicina
alopática convencional se enfoca en atacar el agente patógeno y en ver la salud
desde un punto de vista unicausal, enfocado en la enfermedad, las medicinas
naturales y terapias complementarias se encargan de “fortalecer el terreno”, es
decir, de evitar generar las condiciones de organismos débiles por malos
estilos de vida y alimentación que se constituyan en organismos idóneos para
alojar la enfermedad. En tal sentido, la salud es comprendida en su
integralidad y multicausalidad; lo más importante no es la enfermedad ni el
agente patógeno, lo más importante es el equilibrio de las fuerzas de la vida,
que es un terreno u organismo fortalecido, vivo, equilibrado con su entorno
ambiental y social; por lo tanto el trabajo no es individual, es colectivo y es
afectivo.
6.
Recomendaciones
En la lógica de la medicina
alopática, la comunidad tiene poco que hacer para evitar la enfermedades, salvo
seguir recomendaciones externas y depender de las grandes corporaciones
farmacéuticas. La salud es un elemento preponderantemente individual y físico,
y la clave es atacar al agente patógeno. En cambio, desde las medicinas
naturales y terapias complementarias, se procura un proceso de reeducación
donde las comunidades organizadas aprenden de cosas sencillas que les permitan
desarrollar vidas sanas y organizaciones resilientes, con el aprovechamiento de
los recursos y saberes locales, fortaleciendo las defensas intraorgánicas y colectivas,
que conlleva a un equilibrio con el entorno ambiental y social, por lo tanto,
se trata de un trabajo colectivo y comunitario.
Por lo antes descritos, creemos que es posible una
incorporación de la sabiduría de las medicinas naturales y terapias
complementarias, con el conocimiento de la medicina alopática, sobre todo en
esta coyuntura, en el que la OMS llama a innovar ante nuevos escenarios que
enfrentan no solo un virus no conocido, sino un contexto global complejo.
Dr. Javier Nouel. Educador y naturópata.
Dra. Febe Aular. Médica.
Dr. José Miguel Rondón. Médico, Psiquiatra, naturópata.
Alexis Adarfio Marín. Naturópata y educador
Dr. Renne Moreno. Médico
Dr. Javier Nouel. Educador y naturópata.
Dra. Febe Aular. Médica.
Dr. José Miguel Rondón. Médico, Psiquiatra, naturópata.
Alexis Adarfio Marín. Naturópata y educador
Dr. Renne Moreno. Médico
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